Hasta el Final de los Tiempos

Sin título probable

Si habéis jugado a la ruleta, sabréis que como se juega bien es apostando todo al rojo o al negro, o a pares o impares. Si hacéis la apuesta más segura, las ganancias serán mínimas. Si hacéis una apuesta más concreta, las probabilidades de ganar disminuirán considerablemente.
La vida funciona igual. Puedes apostarlo todo a rojo o negro y tendrás las mismas probabilidades de ganar que de perder. Puedes perseguir también metas simples y sencillas, en las que sea complicado que las probabilidades se pongan en tu contra. O puedes echarlo todo a un número y tener pocas probabilidades de acierto.
Pero si apuestas una y otra vez al mismo número, éste acaba saliendo. Porque todo es probabilidad en el juego. Porque todo es constancia en la vida. Y cuando llega el momento en el que las probabilidades te favorecen, el premio conseguido compensa todo lo apostado y es realmente satisfactorio.


DEYZ, Anixel

martes, 3 de abril de 2012

2. Hasta el final de los tiempos

ACTUALIZACIÓN, 22/JULIO/2023: Todo esto es paja.


Hace un año y casi veintitrés días tenía una duda en la que me gustaba mucho ponerme a pensar: la existencia de todo cuanto podemos ver a nuestro alrededor. "¿Y si todo es una gran mentira?" (me preguntaba a mí mismo). "¿Qué pasaría si todo lo que viésemos, todos los sentimientos de las personas, como el amor o el odio, todos los valores, como la lealtad, la amistad o el valor y, en breve, todas esas cosas tan pequeñas, pero tan grandes no fuesen más que la creación de un ser superior y nosotros no fuésemos nada más que marionetas utilizadas a placer por éste mismo?" También pensé en otras teorías, como la posibilidad de ser el mero sueño de otra persona y, por tanto, que la realidad fuese ficción.
Esta fue la primera vez que manifesté públicamente en un pequeño texto todo lo que pensaba acerca de nuestro mundo.

No sé... 11 de Mar de 2011, a las 16:25

¿Os habéis dado cuenta? Estamos en un puntillo microscópico del Universo, concretamente en lo que llamamos planeta Tierra. ¿Nunca os habéis preguntado qué somos, de dónde venimos o sencillamente por qué existimos? ¿Qué es este sitio? Sabemos que la vida existe, pero ¿qué es realmente? Desafortunadamente, no tengo respuesta para ninguna de estas preguntas u otras de la misma categoría. ¿Y si, como dijo Calderón de la Barca, la vida no es más que un sueño? ¿Tendría nuestra existencia (si es que pudiésemos afirmar que existimos) algún sentido? Me temo que tampoco sabría responderlo. Solo puedo decir que creo que a lo largo de 16 años, 10 meses y dos días no he aprendido nada.

Mario Lee

Pero solamente cinco meses y tres días después hallé la solución a ese problema que durante tanto tiempo me había tenido en vilo (en parte, gracias a una primera lectura al libro de Descartes antes de que empezase el curso y, por muy gracioso que resulte, gracias al videojuego "Star Ocean 3: Till the End of Time"). Con todo en mente, cogí una noche que no podía dormir y llegué a la conclusión de que los sentimientos y pensamientos propios no los controla otro que no sea uno mismo, lo que viene a ser el "Cogito ergo sum" de Descartes ("Pienso, luego existo"). Llegado a ese punto, me levanté de la cama y cogí un cuaderno, con el que hice una pequeña fórmula en la que todas las piezas del puzzle encajaban. A esta fórmula la bauticé como la "Teoría de la Percepción del Universo", donde con un poco de ayuda del final del videojuego citado anteriormente, me propuse que el Universo era una percepción que todo ser tenía hacia éste. Por supuesto, si todos percibimos el mismo Universo, eso es porque éste realmente existe y nosotros también. Así que, un poco más contento tras haber solucionado esta pequeña duda existencial, me entró el sueño y, como padezco insomnio, lo aproveché y me fui a dormir.

Sí, existimos. 14 de Ago de 2011, a las 04:15

Toda mi vida (desde bien pequeñito) me he hecho la misma pregunta: la existencia. Siempre me he preguntado si existimos realmente o si somos un mero sueño o el simple juguete de alguien "superior" o algo así. Pero por fin he hallado la solución al problema que durante tantos días y noches (¡y qué noches!) me ha estado atormentando.


Se suele hablar mucho del destino y la suerte, dos fuerzas sobrenaturales en las que yo no creo, porque soy de los que piensan que las cosas ocurren por los actos que cometemos, buenos o malos, y que nada esta escrito y que si algo puede salir mal, lo más probable es que salga mal ("Ley de Murphy").

Porque nosotros, la mayoría de los seres vivos, tenemos plena autonomía sobre nuestra mente y nuestro corazón. Nosotros pensamos de una forma o de otra, recordamos viejos momentos, sentimos nostalgia, nos arrepentimos, o lo que viene a ser en resumen, sentimos y pensamos por nosotros mismos. Y entonces me vino la luz.

Nuestra mente, nuestro corazón, pensamientos y sentimientos son NUESTROS y de nadie más, lo que nos dota de existencia.
Nosotros pensamos y sentimos de la forma más libre que existe, porque nada (N-A-D-A) ni nadie (N-A-D-I-E) puede influir en ello. Porque cuando queremos a alguien lo queremos y punto. 
No tiene más. Nadie puede decirnos a quien querer y a quien odiar, porque somos nosotros los que tomamos la decisión final. Por lo tanto, ahora que podemos afirmar que tanto nuestras mentes como nuestros corazones son nuestros, podemos decir que el Universo es una percepción que nosotros tenemos.
Sin percepción, no hay existencia.
Pero si todos nosotros percibimos lo mismo, eso quiere decir que el Universo realmente existe.
Ahora saltarían las dudas del porqué de su existencia y la nuestra, pero, ¿realmente importa?
Nosotros existimos aquí y ahora y también el Universo. Y se acabo.

Ahora por fin podré dormir tranquilamente y disfrutar de un descanso reparador.

Mario Lee

A partir de ese día, empecé a tener muchas cosas claras. Obviamente, el tema principal de todo era que la existencia existía. Pero la existencia existía porque el Universo existía. Y el Universo, como dice la "Teoría de la Percepción del Universo", existía porque nosotros (los seres vivos en general) existimos.
Claro, ahí fallaba algo; la idea de que el Universo no podía existir sin los seres vivos (puesto que sin percepción no hay existencia) no terminaba de encajar. Dejé muy claro en su momento que el porqué de la existencia no tenía importancia, pero esto era un dato curioso y me apeteció pensar en ello. Por supuesto, siendo como soy no se me ocurrió atribuir el porqué a un ser todopoderoso y benévolo o al azar. Con tan pocos datos en mente me hice la rayada del siglo, pero mereció la pena.

El porqué de la existencia. 12 de Nov de 2011, a la 01:09

Hace pocos meses escribí una entrada afirmando la existencia de todo cuanto conocemos basándome en la "Teoría de la Percepción". Bueno, yo dije que no era relevante conocer el porqué de nuestra existencia. Y no lo es. Pero a mí me resultó un poco curioso y empecé a pensar en ello. He llegado a una conclusión un tanto inestable.
Yo no soy un hombre creyente, porque sé que el mundo en el que vivimos no ha sido creado por un Dios todopoderoso que algún día derrotará al Mal (Diablo y demás) y cuando muramos nos reuniremos con Él y todo será "chupi-guachi". Eso sí: tampoco he tenido la intención de tragarme que el mundo, todo el Universo, e incluso la vida, ha sido obra del azar. Con esto no quiero decir que crea en el destino, para nada.


De algún modo, lo que trato de explicar es que todo esta conectado entre sí; la formación de la Tierra y el Sistema Solar, LUCA, el Big Bang, probables otros universos, la creación de la materia (¿?)...

Tal vez no somos más que la creación de un igual (o algo parecido) que ha alcanzado una capacidad intelectual superior (hablaríamos de la "Teoría del Diseño Inteligente") o simplemente existe una especie de “fuerza” que nos une a todos (lo que la verdad suena un poco a "La Guerra de las Galaxias") y que después de haberlo creado todo, nos va acompañando mientras evolucionamos.

No tengo ni idea...
Hay tantas cosas que quiero saber...

Pero haya pasado lo que haya pasado, nosotros no estamos aquí por casualidad. Siento poder parecer ignorante, pero no me cabe en la mente que algo tan complejo como la existencia y, concretamente, la vida sea fruto del azar. Podría creérmelo si no viese el día a día y como actúa cada persona ante distintas o iguales situaciones. NO PUEDO creer que no exista un porqué. Todos esos sentimientos de tantas personas no se han creado porque sí. No puede ser. Aún hay más que conocer.


Mario Lee

No me gusta la sensación de quedarme en la duda, pero por el momento no he podido hacer otra cosa. De todos modos, con todo esto la verdad es que he aprendido cosas muy valiosas, porque aunque no tenga claro el porqué estoy aquí o si me ha traído alguien, sí sé que soy yo el que decidirá lo que haré con mi futuro y sé que todas esas cosas que he sentido y siento son lo que hacen que hoy yo sea quien soy.
Y seguiré queriendo a quien quiera (o me toque) querer. Y seguiré estando ahí para los que me necesiten. Y estaré siempre cuidando a los míos. Y seré mi mejor yo. Porque así lo he decidido y así será hasta el final de los tiempos.

Mario Lee

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios son agradecidos. ¡Tu opinión cuenta!